Como todos los años, desde DIAFA, además de realizar los controles glucémicos y el dictado de talleres y actividades, por este medio, también queremos brindarles pautas y medidas de prevención para todas las personas diabéticas. En esta nota, hoy vamos a dar algunos consejos y recomendaciones de uno de los pilares básicos del tratamiento: la alimentación.
Es importante remarcar que los diabéticos, no necesariamente deben seguir un plan alimentario distinto que aquellas personas que no los son, sin embargo, debemos tener en cuenta, que una persona diabética, tiene mayores posibilidades o puede estar presentando otros factores de riesgo (como presión arterial elevada, colesterol y / o triglicéridos elevados, hígado graso o circunferencia de cintura aumentada) que puedan comprometer aún más su estado de salud. Por lo tanto siempre apuntamos a que el plan alimentario para el diabético debe ser preventivo (de estos factores), completo (con todos los grupos de alimentos), armónico (respetando un adecuado aporte de cada alimento) e individualizado (adecuándose a cada persona).
Es por esto que aquí les dejamos algunas recomendaciones:
-Coma las 4 comidas al día en porciones moderadas y realice alguna colación .
-Evite pasar muchas horas sin comer.
-Incorpore alimentos ricos en fibra (salvados, avena, semillas, frutas secas).
-Desayune y meriende con lácteos descremados, con panes y derivados integrales, dulces dietéticos y reemplace el azúcar por edulcorante (Sacarina, Sucralosa, Stevia).
-Para las colaciones puede optar por frutas frescas, quesos frescos bajos en grasa, yogures descremados, cereales integrales o copos de avena sin azúcar.
-Para las comidas principales seleccione cortes de carnes magros, sin grasa visible, disminuya el consumo de carnes rojas y aumente el consumo de pescados
-Consuma con moderación los alimentos almidonados, como las pastas, papas, arroz, polenta, fideos. Es importante que estos estén en las comidas pero en porciones más pequeñas y acompañados con verduras de varios colores. Si se consumen cocidos al dente, recalentados o fríos son más recomendables, ya que se digieren más lento y generan una menor respuesta glucémica.
-Trate de utilizar poca sal, condimente con especias aromáticas, suaves y use el aceite en crudo. No lo someta a cocciones prolongadas o frituras.
-No se olvide de tomar líquido, el agua es la fuente más importante de minerales y nos aporta muchos beneficios. Aumente su consumo
-No tome bebidas alcohólicas o bebidas dulces o azucaradas
Cada plan alimentario debe ser personalizado, tenga en cuenta estos consejos y visite a su médico y nutricionista para un mejor asesoramiento y control de la enfermedad.
Carla Verdejo / Licenciada en Nutrición-DIAFA