“Electra” es, sin duda, uno de los atractivos de los atardeceres y noches pehuajenses. Acaba de cumplir tres años de existencia y paulatinamente se ha convertido en el lugar elegido para pasar un buen momento entre amigos, compartir una mesa en familia y disfrutar de sabrosos platos en un ambiente apacible, excento de ruidos y estridencias.
Su propietario, Ezequiel Pérez, acotó que en “los comienzos se observó que por ser nuevo, tener una ambientación diferente, por la música, no era notoria la concurrencia de mucha gente, pero año a año fue mejorando y los resultados están a la vista. Se llena todos los fines de semana y algunos días se semana también”.
El progresivo afianzamiento satisface sus expectativas: “Mucha gente cree que es para cierto tipo de público, pero la verdad tenemos un público muy variado y la gente se siente muy cómoda y a gusto, porque regresa al siguiente fin de semana y otros concurren cinco o seis veces en la semana”, señala Pérez al corroborar el desenvolvimiento del local.
Por otra parte, considera que “es notoria la presencia de grupos familiares y en esta época que usamos la vereda, se acercan muchas familias con chicos; se sienten a gusto, caminan, no existen riesgos. Es muy tranquilo porque no hay tanto movimiento de autos como en otras zonas”.
Resulta evidente, al evaluar el desenvolvimiento de Electra que “hay gente que busca la tranquilidad. No hay tantos ruidos, se puede comer tranquilo” y muchos consideran que dadas las características del lugar “nadie se siente observado” por ocasiones transeúntes.
En cuanto a los platos que ofrece, hay amplia variedad de exquisiteces en cuanto a precio y preparación. Ejemplificando, Ezequiel manifiesta: “Tenemos platos gourmet, que son difíciles de encontrar en ciudades del interior; amplia variedad de pizzas y sanwichs. Y tenemos el famoso “tapeo” que es una picada distinta a la demás. Se presenta en una tabla, es muy variada en su contenido y se llama “tapeo” como en España, de donde surge esta modalidad de “picaditas”. Es una de las particularidades de Electra y es lo que más se pide”.
Cabe acotar que el nombre de Electra se eligió por el nombre de quien fuera propietaria del inmueble, la Sra. Electra Pujol, convecina que desarrollara diversas actividades comunitarias en la ciudad, integrando el grupo fundador de la Sociedad Espiritista Saénz Cortes.
CELEBRACIÓN
El emprendimiento impulsado por el convecino Ezequiel Pérez se apresta a celebrar el tercer aniversario, festejo que había quedado pendiente de diciembre pasado. Será el 20 de febrero con una cena show a cuyo efecto se cortará el tránsito vehicular para poderer utilizar la calle. Actuará Walter Rúa con un tributo a Sabina y Serrat.